Es Castellet de Galatzó.-17 de Febrero de 2013

Descripción de la excursión:

Empezamos la excursión en la finca pública de Galatzó, que se encuentra en el punto kilométrico 2,250 de la MA-1032 de Capdellà a Galilea. Cuando llegamos al arco de entrada de la finca pública, podemos entrar el vehículo hasta el parking.

Junto al parking encontramos la casa de Ca l’amo en Biel en estado de abandono. A la derecha dejamos el camino reservado a vehículos autorizados que conduce a la possessió de Es Ratxo.

Nosotros continuamos en dirección a las casas de Galatzó, que se encuentran a un kilómetro de distancia, por lo que superamos una barrera por un paso para viandantes. Avanzamos entre campos de cultivo. El Castellet, conocido igualmente como Puig des Caragol, objetivo de nuestra excursión, se levanta imponente a nuestra derecha, ocultando al gigante Galatzó (1025m). Justo después de atravesar el puente del torrente debemos salir del camino que lleva a les cases. Lo hacemos hacia la derecha para coger el camino señalizado de Ses Planes. En su primer plano el camino de Ses Planes cruza otra vez el torrente y continua hasta llegar a una pared a cuyo otro lado se extiende un campo de cítricos, s’Hort des Tarongers. En este punto giramos a la derecha para iniciar una cómoda ascensión. Pronto obtenemos las primeras vistas sobre las Casas de Galatzó y transcurridos diez minutos, después de algunas curvas llegamos a la acequia que lleva agua a los dos molinos de Galatzó.

Continuamos subiendo por el camino de Ses Planes y enseguida alcanzamos el mirador de Ses Cases.

El camino continúa subiendo, en línea recta. Después de una curva a la derecha y otra a la izquierda, andamos unos 100m y nos detenemos, ya que estamos en un punto importante de la excursión. A la derecha encontraremos unos hitos de piedra que marcan el desvío hasta el Castellet. El sendero, está muy sucio por la vegetación pero las fites nos llevarán hasta la cima, no sin antes tener que salvar una pendiente áspera, incómoda por el roquedal, que os obligará a usar las manos en más de una ocasión.

A mitad de la subida nos encontraremos los restos de un muro ciclópedo correspondiente a un yacimiento arqueológico. Las primeras evidencias de la ocupación humana en el valle del Galatzó las debemos situar cronológicamente en la edad del bronce (1800-1100/1000 a.c), en la denominada cultura naviforme. Desde el muro seguiremos en dirección a la cima, siguiendo las fites que se decantan ligeramente hacia la derecha.

Regresamos por el mismo camino de subida y para finalizar la excursión, nos dirigimos hacia las casas de Galatzó.